El libro cuenta la historia de Ponyboy, un chico
que vive en las calles del East Side, en Nueva York. La vida en la calle es
dura, pero él sabe cómo apañárselas, gracias a la ayuda de su pandilla: sus
hermanos Darry y Sodapop, Two-Bit, Johnny…
Uno de los mayores problemas con los
que Ponyboy ha de lidiar son los Socs, unos niños ricos que, por el afán de
divertirse, pelean contra su pandilla, los greasers.
Una noche,
en un acto desesperado por salvar sus vidas, Johnny, uno de los colegas de Pony
mata a Bob, un soc que había intentado matarle a él y a Pony. Desde esa noche
la vida de Pony no vuelve a ser la misma.
El libro
me encantó. Creo que me ha enseñado muchas cosas, una realidad distinta a la
mía, distinta a cualquiera que yo hubiese podido imaginar. Quiero decir, todos
sabemos que eso ocurre, que hay jóvenes malviviendo en las calles, pero
realmente, todo se queda ahí, en el saber que esas circunstancias existen.
El libro
lo muestra de una manera tan real, que es imposible quedarse solo ahí, sabiendo
que esas circunstancias se dan, quieres indagar más. Como por ejemplo, ¿por qué
no reciben ayudas sociales para salir de esa situación? o ¿por qué los socs no
pagan nunca por lo que hacen y los greasers entran y salen de la cárcel
constantemente? ¿Por qué socialmente los miembros de familias pobres que viven
en la calle son tachados de malos y peligrosos cuando, en numerosas ocasiones,
las familias con poder adquisitivo son peores?
En
conclusión, creo que mucha gente debería leer este libro, para no quedarse
únicamente con la imagen que la sociedad ha creado respecto a algunas personas.
Para no catalogar a un chico que vive en la calle de malo y al que tienes de
vecino de bueno; porque no es así.
Paula Balsa Díaz 3º ESO
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